El gobierno de México invirtió 600 millones de dólares para que Pemex adquiera al 100 por ciento las acciones de la refinería Deer Park, de la petrolera Shell, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con esto, el Estado mexicano pasa a ser propietario de siete refinerías, sin contar todavía con la que se construye en el puerto de Dos Bocas en Paraíso, Tabasco.
“En esencia, recibimos seis refinerías en mal estado, las estamos modernizando, se está reiniciando también la coquizadora de Tula para ampliar la capacidad de refinación en esa planta y dos refinerías más: recibimos seis refinerías y vamos a entregar ocho”, presumió el presidente López Obrador.
El mandatario detalló que esta operación costó 600 millones de dólares y que sólo contempló la compra del 50% de las acciones, pues la otra mitad ya pertenecía a Pemex.
“Nos costó 600 millones de dólares, estamos hablando de alrededor de 12 mil millones de pesos. No crédito, no deuda, sino de los ahorros por no permitir la corrupción, por hacer un gobierno honesto y austero, sin lujos”, ahondó.
En cuanto a los niveles de producción, el tabasqueño aseguró que la refinería recién adquirida tendrá la capacidad de producir 340 mil barriles diarios de combustibles, los mismo que se espera de la planta de Dos Bocas.
Visiblemente emocionado, el presidente reiteró en su mensaje a través de redes sociales la promesa de que México será autosuficiente en la producción de combustibles para el 2023, por lo que ya no será necesario importarlos de otros países, lo que derivará, aseguró, en que ya no habrá aumento en los precios.
El mandatario dijo que en su conferencia de prensa del próximo miércoles dará más detalles sobre la operación, pues invitará al director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, y a todo al consejo de administración.
Además de la refinería de Deer Park y la futura de Dos Bocas, Pemex cuenta con seis refinerías más: la “Ing. Antonio M. Amor” ubicada en Salamanca, Guanajuato inaugurada en 1950; la “Lázaro Cárdenas”, de Minatitlán, Veracruz, abierta en 1956; y la “Miguel Hidalgo”, que entró en operaciones en 1976 en la ciudad de Tula, Hidalgo.
Ese mismo 1976 se abrió la refinería “Francisco I. Madero” ubicada en Ciudad Madero, Tamaulipas; posteriormente, en 1979, se inauguraron las dos últimas: la “Ing. Antonio Dovalí Jaime”, en Salina Cruz, Oaxaca y la “Ing. Héctor R. Lara Sosa”, en Cadereyta Jiménez, Nuevo León.
Fuente: Proceso.