Los gobernadores de Puebla y Coahuila manifestaron su inconformidad con el plan de regreso a la “nueva normalidad” que el presidente Andrés Manuel López Obrador y su gabinete presentaron este miércoles en Palacio Nacional.
Miguel Barbosa, mandatario de Puebla, reclamó que la reapertura de la industria automotriz echará abajo todas las medidas de distanciamiento implementadas en el estado –donde se encuentran las armadoras de Audi y Volkswagen–, mientras que el gobernador Miguel Riquelme manifestó que este plan no corresponde a la realidad de Coahuila y deja ver que se elaboró sin conocer las condiciones de cada localidad.
Puebla cuestiona regreso de industria automotriz
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, reclamó que se haya contemplado a la industria automotriz como una actividad esencial ya que esto echaría abajo todas las medidas de precaución implementadas en el estado para evitar la propagación del COVID-19.
‘Poner en marcha la industria automotriz el 18 de mayo acaba con las medidas implementadas por el gobierno estatal para enfrentar el momento más crítico por el que pasa la entidad ante la pandemia’, sentenció el mandatario estatal en su videoconferencia matutina.
Barbosa Huerta precisó que al gobierno de Puebla le hacen falta elementos para tomar una posición sobre el regreso a la normalidad, planteado por la federación.
Aclaró que aunque entiende la importancia de la reactivación económica y la industria automotriz, las decisiones de su administración serán en favor de la salud y de la vida de los poblanos.
Riquelme critica semáforo
En tanto, el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, dijo no estar de acuerdo con la forma en que el presidente López Obrador presentó el plan de reapertura, el cual, dijo, es “lamentable y preocupante”.
“Yo no creo en los semáforos que nos están poniendo el día de hoy, no aplican, yo creo no conocen Guerrero, no conocen Hidalgo, no conocen Viesca, Parras, Cuatrociénegas, y mucho menos conocen Saltillo, Torreón, Monclova, Piedras Negras, Acuña y esta gran ciudad que hoy cumple años, Ramos Arizpe”, dijo el mandatario durante la entrega de paquetes de limpieza a pobladores.
Riquelme expresó que pese a que no está de acuerdo con este plan, su gobierno colaborará para establecer los protocolos para el regreso a actividades económicas y sociales de manera paulatina, pues la entidad está preparada para ello.“
Coahuila estará tratando de empatar lo que hoy comentó el gobierno federal, la verdad es que no hay una secuencia, sin embargo, no queremos tampoco caer nosotros en un desacato que luego nos lleve a una polémica, queremos empatar las cosas que es lo que debí haber hecho el gobierno federal desde un principio, empatarnos a todos los estado”, expresó el gobernador.
Respecto a la incorporación de las actividades de construcción, minería y fabricación de equipo de transporte como actividades esenciales, Riquelme explicó que al no tener una fecha por parte del gobierno federal su administración trabajará en establecer protocolos e inspecciones a estos centros de trabajo.
El mandatario estatal detalló que con la incorporación de estas industrias, 317,000 empleos regresarían a la vida laboral.
FUENTE: EXPANSIÓN
