Para pagar la renta de bodegas en las que se tiene asegurada mercancía de procedencia ilegal, en breve el Gobierno de la República presentará una iniciativa de reforma administrativa a fin de que “con prontitud” esos bienes sean vendidos en tianguis del bienestar, los cuales se instalarán en los lugares más pobres del país.
De acuerdo con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador se tiene que pagar la renta de hasta 300 bodegas distribuidas en todo el país y en los tianguis del bienestar se ofrecerá a la gente desde ropa, telas, juguetes, calzado y hasta sistemas de aire acondicionado.
“Para mantener esas bodegas tenemos que pagar la renta, se echan a perder las cosas, hay que pagar renta y estamos ya por terminar de elaborar una reforma administrativa para que todo lo que se confisque con prontitud, con rapidez, de manera expedita se le entregue a la gente y van a haber tianguis del Bienestar en las zonas más pobres, se va a llevar todo eso para que la gente lo aproveche, pronto vamos a informarles que tiene que ver lo mismo con los aviones, de cómo utilizar todo lo que ahora no tiene ninguna función como por ejemplo las rifas de las casas, de los ranchos para la Lotería Nacional en beneficio del pueblo”, indicó a los medios de comunicación.
En el caso del avión presidencial que no ha sido posible vender “por extravagante y lujoso”, López Obrador comentó que cuando vino la vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris a nuestro país, le compartió lo complicado que ha sido esa operación.
Al escucharme, Kamala Harris, “riéndose me dice que a lo mejor estos potentados que ahora ofrecen viajes al espacio (…) que a lo mejor a uno de ellos, con todo respeto, le interesaría tener este avión tan lujoso”, detalló el presidente.
En aras de conseguir más recursos para la construcción de obras en beneficio de la gente, como la presa Santa María, López Obrador dijo que diciembre de este año se rifará un terreno de 2 mil 500 hectáreas con vista a la playa en Sinaloa, que costó 120 millones de dólares y que fue propiedad el ex gobernador Antonio Toledo Corro, el cual falleció en el 2018.
En razón de lo elevado de su costo y que tampoco ha sido posible vender, se decidió para rifarlo dividir en tres el terreno, el cual en su momento iba a ser destinado para la construcción de un desarrollo turístico, solo que al ubicarse muy lejos de las zonas urbanas, el proyecto no prosperó.
Fuente: Excélsior.
