Presidente de la Cámara de Diputados, abogado litigante en materia electoral y uno de los más recalcitrantes críticos del INE, el legislador morenista Sergio Gutiérrez Luna afirma que el heavy metal es su pasión y, en contraste, se define como “medio cursi” para el cine, pues le gusta ver comedias románticas.
Su pasatiempo es armar figuras de Lego con sus hijos de cuatro y seis años de edad, respectivamente, y presume en su oficina del Palacio de San Lázaro una nave espacial de la saga de Star Wars construida en tres días.
Orgulloso de la gastronomía de su tierra natal, el diputado federal sostiene que la cochinita pibil de Minatitlán es la mejor del país, “¡mejor que la de Mérida!”, y recomienda probar los tamales de chanchamito, “¡buenísimos!”.
¿Es cierto que de panista pasó a ser morenista en menos de tres años?
No, nunca he sido panista, el único partido en el que he militado es Morena, así que es un mito.
A juzgar por sus publicaciones en redes sociales, usted es fanático del rock, del heavy metal…
Fíjate que esa es mi pasión, el rock, el metal. Me gusta desde que tenía once años y no he perdido el gusto ni la afición, no solo por escuchar la música, sino ir a conciertos, me gusta mucho ir a conciertos, solía ir a casi todos los conciertos en la Ciudad de México; la verdad es que soy amante del rock, del metal.
Empecé a formar mi colección, compré mi primer disco cuando tenía once años (Practice What You Preach, de Testament), es de 1989, lo compré en una tienda que se llamaba Discos Tere, todavía lo conservo, tengo una colección, y desde esa fecha hasta ahora me gusta comprar y escuchar discos. Tengo una colección que en 30 años he ido formando y que a mí me llena de mucho orgullo, ¡es mi tesoro!
¿Su banda favorita?
¡Qué pregunta tan difícil! Podría ser Metallica. Y siguiendo en el dos y tres, Megadeth y Kiss.
¿Y su top de tres rolas?
Mi top de tres: Seek & Destroy, de Metallica; Hangar 18, de Megadeth, y de Kiss, Detroit Rock City.
¿Cómo se vestía para ir los conciertos, usaba el cabello largo?
En la época de la secundaria hubo un momento en que me dejé el pelo largo, pero poquito, nunca tan largo, iba en una escuela de padres josefinos y entonces no te dejaban usar el pelo largo, y tenías que peinarlo así como relamido para que no se notara tanto, y finalmente ya cuando llegué aquí, pues me volví como con más cercanía a la afición que tenía al rock e iba muy seguido a muchos conciertos y todavía hasta la fecha, eso no dejo de hacerlo.
Además del rock, ¿cuáles son sus hobbies?
Soy muy apegado a los niños, tengo dos hijos, uno de 4 y uno de 6; Víctor, el chico, y Sergio, el más grande. Últimamente encontramos una afición juntos de ir armando legos, eso nos permite estar juntos, me pasan las piezas, vamos haciendo cosas y eso como que nos da unidad y yo lo he agarrado también como afición.
La lectura también me gusta mucho, tengo también una colección importante de libros que fui comprando desde que era adolescente; mi papá es un arquitecto, es una persona que lee mucho, y él me inculcó la lectura, sobre todo la novela, mucha novela política, ciencia ficción.
¿Quién es su autor favorito?
Luis Spota, sin duda, autor de varios libros famosos, he leído casi todos los de él, hay uno muy conocido por todos que se llama “Casi el Paraíso”, que se trata de un italiano, Hugo Conti, que llega a un país a quererlo conquistar a través de seducir mujeres vinculadas con el poder, haciéndose pasar por conde y engañando a toda una sociedad, pero mi novela favorita de él se llama “Palabras Mayores”, que narra el momento en que un Presidente de la República está por concluir su mandato, le falta un año para concluir, y cómo en su gabinete se da la lucha por sucederlo, y concluye finalmente con la terminación del Presidente de la República designando a un candidato.
Volviendo a los LEGOs, ¿cuál figura les ha dejado mayor satisfacción?
Pues yo creo que este, una nave espacial de la serie Star Wars (Caza Estelar Ala-A), la armamos y nos costó algo de trabajo, está medio complicado, nos llevamos tres días, no completos, pero si dedicándole tres tardes.
En el cine, ¿qué género le gusta?, ¿frecuenta el cine en sala?, ¿prefiere el cine en plataformas digitales?
Me gusta mucho el cine y me gustan mucho las comedias románticas, soy medio cursi, me divierten mucho las comedias románticas.
¿Y la gastronomía, diputado?, como veracruzano, ¿qué comida le gusta, cuál es su platillo favorito?
La mejor gastronomía, lo sostengo, es la de mi pueblo. Minatitlán es un lugar en el que se come de maravilla, unos tamales buenísimos que se llaman tamales de chanchamito.
La mejor cochinita pibil está en Minatitlán, ¡mejor que la de Mérida!, lo he dicho y he grabado videos que generan polémica, pero los invito a una cata de cochinita pibil, y hay mucha comida veracruzana, que en realidad de donde yo soy, Minatitlán, que es una zona istmeña, no propiamente jarocha, que tiene que ver con el Istmo de Tehuantepec y que está influenciada mucho por cocina oaxaqueña, que tampoco es la cocina del centro de Oaxaca.
¿Usted cocina, tiene alguna veta de chef?
Más o menos, no tanto, hago cereal, sandwiches de vez en cuando. ¡No! Sé cocinar, sé cocinar. De tiempo completo como presidente de la Cámara de Diputados, antes como representante de Morena ante el INE.
¿cómo es la convivencia con sus hijos?
De entrada, todos los días los llevo a la escuela y un día a la semana los traigo conmigo a la cámara a comer conmigo, y los fines de semana, cuando no ando de gira, pues estoy con ellos todo el tiempo, todo el tiempo que no trabajo es para ellos.
Fuente: Milenio.
