La Ley General de Amnistía, aprobada en el Senado el lunes pasado, beneficiará a poblaciones históricamente vulneradas, en particular mujeres pobres, indígenas y transexuales “que dentro de las cadenas de opresión del patriarcado se han visto desigualmente afectadas”, coincidieron organizaciones feministas.
Equis Justicia para las Mujeres estimó que alrededor de 600 féminas encarceladas por delitos contra la salud podrían obtener su libertad. Por su parte, el Grupo de Información en Reproducción Elegida (Gire) señaló que si bien no se beneficia a mujeres acusadas por aborto, dado que en el fuero federal no hay ninguna en prisión, sí “es un paso para reconocer y garantizar su autonomía reproductiva”.
Esta ley “no va a terminar con la criminalización de las mujeres que abortan porque la norma que las penaliza quedó intacta; sin embargo, esperamos que sea un primer paso para que legisladores y legisladoras emprendan acciones no sólo para liberarlas sino para que dejen de ser perseguidas”, dijo en entrevista Jimena Soria, de la organización Gire.
Viridiana Valgañón, abogada de Equis Justicia para las Mujeres, destacó que la aprobación de la Ley General de Amnistía es un mensaje importante “de justicia, del reconocimiento de la criminalización de muchas mujeres”.
En entrevista, indicó que con esta iniciativa podrían ser liberadas aproximadamente 69 mujeres encarceladas por posesión de droga en su modalidad simple, 9 indígenas, 16 mujeres en supuesto de personas mayores de edad y 293 mujeres jóvenes presas por delitos como robo simple.
La especialista exhortó al Ejecutivo para que junto con Secretaría de Gobernación conforme la comisión que revisará los casos, para que los beneficiados puedan obtener su libertad “lo más pronto posible”.
FUENTE: LA JORNADA